El seguro de inmueble es un plan que te ofrece una empresa aseguradora para protegerlo frente a diversas situaciones de riesgo que puedan generar daños. A través de cuotas mensuales o anuales te garantizan la reparación de deterioros previamente contemplados en el contrato. Si aún no has pensado en asegurar tu vivienda, te dejamos cinco beneficios para que consideres hacerlo.
Existen varios tipos de garantía. Los seguros incluyen varios tipos de cobertura del hogar, por ejemplo, protegen los bienes inmobiliarios que son la casa en sí misma, los suelos, paredes y demás estructuras que no puede retirarse sin causar daños a la vivienda. Los bienes mobiliarios también están asegurados, es decir, los objetos que están dentro del hogar y que puedes moverlos sin afectar la estructura del mismo (muebles, mesas, decoración, vehículos). También existe una cobertura de responsabilidad a terceros que se refiere a los daños causados a terceras personas u hogares de los vecinos.
Puedes salir de casa con tranquilidad. Si antes salir de casa implicaba una gran logística por la imposibilidad de contar con algún tipo de protección, gracias al seguro del hogar puedes ausentarte durante un largo periodo de tiempo sin ningún problema. Tienes la certeza de que tu hogar está amparado por la entidad aseguradora.
En caso de algún daño no debes pagar por la reparación. Al contar con el respaldo de una póliza de seguro de hogar, puedes estar tranquilo frente a algún imprevisto en sus inmediaciones, ya que es tarea del ente responder y repararlo. Por eso, asegurar tu hogar también es una inversión que te evitará gastos extras a futuro.
Cobertura en diferentes casos. ¿Sabías que en caso de robo o asalto también te protege? Si alguien hurta un objeto de valor de tu hogar, cuentas con el amparo de la aseguradora; igualmente, si los cristales de las ventanas exteriores o interiores se parten a consecuencia de los fuertes vientos. Además, si ocurre un incendio o desastre natural que ocasione daños al hogar y a los bienes dentro de él, también cuentas con el apoyo de tu seguro.
Recuerda que antes de firmar un contrato para asegurar tu hogar debes leer detenidamente y con mucha atención cada una de las cláusulas. De ser necesario pide ayuda a un abogado de confianza para que pueda orientarte en las dudas que surjan.
