Comprar una casa supone una inversión realmente significativa que no solo incluye el valor de la propiedad sino el de cada uno de los objetos que luego le darán vida al hogar. El esfuerzo, la dedicación y el significado emocional que representa cada rincón de la casa es invaluable, por eso es fundamental protegerla.
Si vas a comprar un inmueble o ya tienes uno y aún no lo has asegurado, ¡reconsidéralo! Sabemos que el dinero no repone los sentimientos, pero en caso de un incendio o inundación, contar con el respaldo de un seguro de vivienda te ayudará a recuperar algunos elementos y a comprar otros nuevos para evitar quedarte sin nada.
Si todavía no estás completamente convencido, te dejamos otros beneficios para invertir en él:
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Resguarda tu inversión. ¿Cuánto dinero, esfuerzo, contactos y dedicación alberga cada rincón de tu hogar? Si tuviste que solicitar una hipoteca para pagarla, conoces el empeño diario que supuso convertirla en una vivienda propia. Es por eso que tenerla asegurada es una inversión que te ayudará a protegerla de los principales riesgos que pueden afectarla y te dará tranquilidad. De igual forma, te permitirá contar con una cobertura por Responsabilidad Civil en caso de que los imprevistos le generen daños a algún vecino.
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Protege tus pertenencias. La mayoría de los seguros de vivienda ofrecen una cobertura para las pertenencias que se encuentran en el inmueble, lo que asegura el pago por joyas, muebles, electrodomésticos y hasta ropa en caso de de incendios, inundaciones o desastres naturales.
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Ofrece liquidez para gastos adicionales. Muchas veces, en caso de incendio, inundación o desastre natural, es necesario pagar hoteles u otro lugar de alquiler mientras el seguro cubre las reparaciones del hogar, por lo que algunas pólizas ofrecen la facilidad de tener dinero para cubrir estos gastos.
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Obtienes asistencia. A veces, no es necesario que ocurra un incendio o inundación para hacer uso del seguro. Algunas mutuas incluyen la posibilidad de cubrir los gastos de fontanería o reparaciones generales dentro de la vivienda para mayor facilidad y comodidad.
Asegurar la casa siempre es una inversión. Hay quienes lo ven como una pérdida de dinero, pero lo cierto es que en el momento menos esperado ocurren los accidentes, de manera que un seguro de respaldo es la mejor opción para garantizar las reparaciones necesarias dentro y fuera del inmueble.
